Acceso a las TIC´s: la versión de Castilla La Mancha



La realidad de la navegación en la Sociedad de la Comunicación e Información, en la región donde vivo y en referencia a las posibilidades de acceso, uso y manejo de las TIC´s como facilitadoras y posibilitadoras de desarrrollo social, individual y humano, pasa a nivel público (participación institucional y ciudadana), por lo que aquí se ha venido en llamar "Red de Centros de Internet" que nacieron bajo una filosofia centrada en las redes, como estructuras abiertas, capaces de expandirse sin límites, sabiendo que una estructura social basada en las redes es un sistema dinámico y abierto, susceptible de innovarse sin amenazar su equilibrio. Bajo esta premisa el gobierno regional define un centro de Internet " como salas públicas de acceso libre, dotadas con equipos informáticos y de comunicaciones (ordenadores, impresoras, webcam, escáner…) para acceder a redes y servicios de Internet, donde cualquier ciudadano pueda utilizar estas herramientas para editar, procesar, imprimir, reproducir o grabar documentos electrónicos, consultar páginas web o utilizar el correo electrónico", existiendo centros de Internet en las diferentes localidades y que funcionando como redes locales independientes, pueden controlarse desde un servidor central alojado en la Junta de Castilla La Mancha.

Telecentros: Redes sociales de desarrollo sociocomunitario

¿Qué entendemos por telecentros? La idea o el concepto mismo puede tener múltiples connotaciones, enfoques u objetivos, pero lo que creo que sí que está claro es su finalidad, que no es otra que facilitar el acceso universal a las TIC´s como potenciadoras del desarrollo social, comunitario o económico de los pueblos, comunidades o naciones. Y uno de los principales medios para lograr este acceso universal a corto y medio plazo sobre todo en los países en vías de desarrollo, son sin duda los telecentros.

Redes sociales y movimientos cívicos

Para abordar esta cuestión, he tomado de base un documento de Jorge Alberto Silva Machado titulado "Movimientos de base y activismo en red", donde trata de identificar cuáles son las características principales de las nuevas formas de organización de los movimientos sociales considerando la creciente incorporación de las nuevas tecnologías de información y comunicación (TIC) en sus estrategias de planificación, articulación y acción. Esta tecnología no sólo se ha convertido en instrumentos de organización y acción sino que también ha servido para el surgir de nuevas organizaciones y nuevos movimientos.

Redes sociales:Protección y seguridad civil

La conectividad y la conexión en redes distribuidas que permiten las redes sociales digitales, nos van a permitir articular movimientos y acciones desde el espacio virtual a los espacios reales y también dentro del propio ciberespacio, rompiendo la barrera del tiempo y del espacio físico para dar respuesta social por ejemplo, a desastres naturales, donde la capacidad de prevención y reacción es fundamental. Una muestra en este sentido la tenemos en un artículo que he encontrado en Internet sobre el terremoto de Japón donde las redes sociales han jugado un papel fundamental como medios de comunicación alternativa.

Brecha digital y Tercera edad



En relación con la diferencia generacional, podemos hablar de la denominada brecha digital generacional, que sería la distancia que separa a los nativos digitales y a los migrantes digitales, es decir, la fractura en el uso y manejo de las tecnologías entre los menores y los mayores de 45 años. De aquí entendemos por nativos digitales a aquellos que nacieron en un mundo en que ya existía Internet principalmente y por migrantes digitales son quienes vivieron en un mundo sin esta herramienta y hoy tienen que adaptarse a esta nueva nueva realidad que está transformando las relaciones sociales, formas de producción, valores sociales...Si esta brecha es grande, podemos imaginar perfectamente la existente entre los nativos digitales y las personas mayores (de 65 años en adelante). Estas personas han vivido contextos sociales e históricos totalmente distintos y han formado sus identidades y  establecido relaciones sociales en base a estos, conllevando lo anterior entre otras cosas a que su visión social, necesidades e intereses sean totalmente distintas y, si nos centramos en una sociedad como la española, a esta edad ya están jubilados y por ejemplo no necesitarán un reciclaje profesional, pero si logramos conectar sus intereses y motivaciones con la tecnología que se los pueda proporcionar, estaremos hablando de un acercamiento a estas tecnologías.

Brecha digital y minorías étnicas

Antes de abordar la brecha digital en referencia con las minorías étnicas o grupos minoritarios, considero que hay que tener muy claro y saber que en primer lugar tenemos que tener en cuenta ante todo, las necesidades o demandas sentidas de estas personas y que las mismas son las que valorarán la importancia o no de las TIC´s en sus vidas. Por eso es fundamental permitir que cada individuo se sitúe dentro de la comunidad a la que pertenece en primer lugar, al mismo tiempo que si lo considera pueda aprehender o nutrirse de los medios para abrirse hacia otros grupos o comunidades y poder ocupar un lugar efectivo y sentido, de circulación individual y social allá donde se encuentre.
Para que lo anterior pueda producirse, es necesario poner en valor los recursos humanos existentes y disponer de los materiales adecuados para construir y afrontar esta tarea con garantía de éxito y para ello entre otras cosas debemos tener en cuenta y reconocer; a los actores o las actrices participantes, los hechos y circunstancias sociales que pueden condicionar los accesos a los espacios, ya sean reales o virtuales y el desarrollo de los mismos. Así como, siguiendo a Linda Leung, entender la etnicidad como una configuración dinámica de los diferentes aspectos de la identidad y saber que no se puede definir sin hacer referencia a la clase, genero, sexualidad, edad y otros aspectos de la subjetividad. Aquí tenemos que hablar también de esos aspectos de la identidad sufragados en relación al trabajo o la educación tanto desde una visión universalista como desde una visión identitaria, procedente de la etnicidad, donde se han de recomponer y ocupar nuevos espacios, debido a las profundas transformaciones sobre todo cualitativas, introducidas por las nuevas tecnologías que han ahondado tanto en los modos de producción, empleo y desarrollo, como en las modalidades de relaciones políticas, sociales y culturales.

Redes sociales: Implicaciones políticas y sociales

Las redes sociales han existido siempre, pero hoy asistimos a una revolución significativa de las mismas, ya que las nuevas tecnologías permiten nuevas posibilidades y su uso genera nuevos espacios de desarrollo social e individual susceptibles de ser colonizados por los diferentes grupos y comunidades y que a demanda social pueden crear sin lugar a duda una esfera relacional virtual umbilical con una esfera relacional física, donde se puede poner en juego la articulación de diferentes prácticas sociales y donde convivan los diversos usos de estos espacios y se puedan fragmentar, moldear y malear las identidades colectivas e individuales teniendo como base una arquitectura de red distribuida donde nadie depende de nadie en exclusiva para poder llevar a cualquier otro su mensaje, tal y como nos dice David de Ugarte en su libro El poder de las redes y mas concretamente en el capítulo de la Pluriárquia a la Blogsfera donde habla extensamente de esto.

La brecha digital de género



Dependiendo del contexto situacional, perspectiva u objetivo que pretendamos alcanzar, la brecha digital se puede definir de múltiples maneras. Por ejemplo, si hablamos de ella en función de penetración e implantación dentro de un país, sería la diferencia de capacidades que tienen estos para acceder, adaptar y crear conocimiento con el uso de las TIC. Si nos vamos acercando hacia las comunidades y las personas,  el impacto que produce sobre ellas, sería las diferencias de aprovechamiento de oportunidades debido principalmente a la falta de acceso a las tecnologías, falta de cualificación...y si afinamos un poco más hacia el individuo y nos introducimos en su "interior"  podemos hablar incluso, desde una cuestión cognitiva, de una división cultural y social entre las personas capaces de usar las nuevas tecnologías y las que no, pero no sólo en base a saber su uso funcional o instrumental sino a la necesaria potenciación de capacidades que contribuyan al desarrollo del logro y satisfacción personal y social.
Si nos centramos en la perspectiva de género o en la dimensión de la misma, podemos definir la brecha digital de género como aquella que impide que la mujer se incorpore y participe en la sociedad de la información en igualdad de condiciones, y como en otros ámbitos nos encontramos con lagunas sociales en lo que respecta a la igualdad entre hombres y mujeres, marcadas e impuestas por patrones culturales, sociales e incluso biológicos. Pero afortunadamente en determinadas sociedades como la nuestra se ha avanzado mucho en este sentido, aunque todavía nos queda por hacer.

Ciudadanía del siglo XXI

En un mundo como el actual, las competencias individuales y sociales para desenvolvernos en esta sociedad, pasan por la adquisición y adaptación de dominios tecnológicos eficientes y eficaces que nos preparen para afrontar con éxito sobre todo, la nueva estructuración de la sociedad en red que se está conformando y la presión del estrés competitivo globalizador que atrapa a este mundo. Para ello, no se si estaréis de acuerdo conmigo, las competencias a trabajar deben tener en cuenta entre otras cosas, una utilización didáctica y educativa de la tecnología manejada adecuadamente, que proporcione múltiples soportes y recursos a la ciudadanía del siglo XXI, así como que sirva de vínculo para todo el entramado del entorno sociocultural de una sociedad occidental como la nuestra, que tiende a la globalización y a la estructura en red.
 

El empoderamiento en los países en vías de desarrollo: ¿Espacio para las las TIC´s?

“El empoderamiento es como la obscenidad, no sabes como definirlo pero lo conoces cuando lo ves.”

Strandberg

El término empoderamiento tiene diversos significados, según el contexto sociocultural, político, ambiental... donde se ponga en juego y, su definición varia según el campo o disciplinas desde donde se acometa. Se puede entender como un proceso, como un producto, como un enfoque o como un fin. Además, es multidimensional ya que tiene implicaciones a nivel individual, organizacional, político, sociológico, económico o espiritual.
Desde el enfoque que le damos en este artículo, destacamos la definición que hace del mismo el Banco Mundial de Desarrollo definiéndolo como la expansión de los recursos y capacidades de los pobres para participar, negociar, influir, controlar y exigir que las instituciones que afectan a sus vidas les rindan cuentas. Identificando a su vez cuatro elementos, comunes en distintos contextos, que favorecen la promoción del empoderamiento: el acceso a la información; la inclusión y la participación; la rendición de cuentas y la capacidad de organización local.